La Encuesta de Ocupación Hotelera (EOH) del INDEC reveló que en junio se hospedaron 230.672 turistas internacionales en Argentina, de los cuales el 52,2% se concentraron en la ciudad de Buenos Aires y un 27,8% en la Patagonia.
A lo largo del primer semestre, el país recibió 2.088.952 visitantes no residentes, lo que representa una baja del 1,5% en comparación con el mismo período de 2023. Esta caída ha sido especialmente grave en la Ciudad de Buenos Aires, que registró una disminución del 25,9% en la cantidad de turistas internacionales.
Los operadores del sector destacan dos factores clave que explican la caída del turismo receptivo en Argentina:
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Falta de promoción internacional: La ausencia de una estrategia de promoción efectiva en las principales ferias turísticas del mundo ha reducido la visibilidad del país, afectando su capacidad para atraer turistas extranjeros.
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Encarecimiento en dólares: El atraso cambiario ha incrementado los costos en dólares para los turistas internacionales, desincentivando su decisión de viajar a Argentina.
Además de Buenos Aires, otras regiones como la Patagonia y el Litoral han visto una disminución en la ocupación hotelera. A pesar de la caída en la cantidad de turistas, la estadía promedio de los visitantes aumentó un 1,4% en junio, alcanzando las 2,3 noches a nivel nacional, con la Patagonia liderando con un promedio de 2,8 noches.
La disminución del turismo extranjero en Argentina ha encendido alarmas en el sector empresarial, que señala el atraso cambiario y la falta de promoción internacional como las principales causas de esta crisis.
Los operadores turísticos instan a una respuesta estratégica para revertir la tendencia negativa y recuperar la competitividad del país en el mercado turístico global. Sin una intervención adecuada, la situación podría seguir deteriorándose, afectando aún más a la economía del turismo en Argentina.