Según informaron los voceros de la compañía de bandera, desde el pasado 5 de marzo se paga un importe extra por todo equipaje de cabina -bolso o carry-on- con un peso máximo de ocho en su tarifa más económica (Promo).
En la categoría tarifaria siguiente tarifaria (Base) dejó de incluirse el equipaje despachado en bodega hasta quince kilos por el que ahora hay que pagar extra.
De este modo, ahora los vuelos de cabotaje sólo incluyen en el precio un artículo personal que no exceda los tres kilos que equivalen a una cartera o una mochila pequeña pero ya no el carry-on.
Para aquellos de la tarifa inmediatamente superior se incluye ese artículo personal más un carry-on que no sobrepase los ocho kilos aunque no contempla al equipaje despachado en bodega.
Con estas nuevas medidas, la posibilidad de llevar un artículo personal más carry-on y equipaje despachado quedó reservada para las tres categorías tarifarias más altas como son Plus, Flex y Premium Economy que suman otros beneficios.
Desde la asunción presidencial de Milei el pasado 15 de diciembre, Aerolíneas Argentinas implementó diversas políticas empresariales para disminuir su déficit como, entre otras, un retiro voluntario para sus 8.000 empleados de tierra.
Según las estadísticas oficiales de la compañía de bandera, se vendieron once millones de pasajes en el mercado argentino donde los mayores picos de compra se registraron para vacaciones de invierno y fines de semana largo en los que se aprovecharon los beneficios del programa estatal de reintegros PreViaje.