Este cálculo se realizó tomándose en consideración la cantidad de visitantes que habitualmente congregan los parques chilenos durante esta época del año.
Además, los expertos de la Fedetur advirtieron que esta pérdida de ingresos también perjudicaría las arcas de la Corporación Nacional Forestal porque un porcentaje del presupuesto del organismo se obtiene a través de las entradas vendidas en los parques chilenos.
Con relación al paro como medida de fuerza de los trabajadores trasandinos, la Fedetur opinó que deben mejorarse las condiciones laborales de los guardaparques ofreciéndose para contribuir a un acuerdo con el gobierno del presidente chileno Gabriel Boric Font.
“En Fedetur planteamos la situación al gobierno y las autoridades sectoriales porque estamos conscientes que hay que mejorar las condiciones laborales de los guardaparques para trabajen de forma adecuada con los elementos esenciales”, explicó Helen Kouyoumdjian, vicepresidenta ejecutiva de Fedetur.
Actual número dos de la entidad federativa, Kouyumdjian aseguró que su sector está disponible “para contribuir a que se logre un pronto acuerdo entre los guardaparques y el gobierno resolviendo sus demandas y evitándose prolongar un paro que perjudica tanto al turismo como a todo Chile”.
Kouyoumdjian agregó que “las personas que visitan los parques, especialmente los turistas extranjeros, toman la decisión con bastante antelación viéndose afectados tanto los que iban a visitar los recintos en estas fechas como quienes quieren hacerlo en un tiempo más”.
La dirigente empresaria instó a solucionar el conflicto para terminar con la incertidumbre que resta posibilidad de captar turismo receptivo como local.
“La incertidumbre no permite planificar anticipadamente, lo cual es muy complejo, considerando que la principal motivación de los visitantes del exterior consiste en realizar turismo de naturaleza en nuestros parques nacionales”, añadió la vicepresidenta de Fedetur.
Durante estos primeros nueve meses de 2019, Chile recibió a 911.134 turistas extranjeros incluyendo 600.000 viajeros procedentes de países de Américas del Sur mientras un 10% de los visitantes fueron ciudadanos de diferentes naciones de Europa.
Según datos oficiales de Dataturismo, dependiente del Servicio Nacional de Turismo (Sernatur) de Chile, la Argentina es su principal fuente emisora aportándole 245.000 visitantes desde inicios de enero hasta fines de septiembre pasado.
De acuerdo a las estimaciones del gremio turístico, Chile recién en cuatro años y medio podría recuperar estas cifras que tenía en la época previa a la pandemia cuando recibía anualmente a seis millones de turistas procedentes del exterior.