Con un total de 10.900 habitaciones en Cuba, la compañía privada de capitales canadienses reforzará su presencia en esta isla de 37,5 kilómetros cuadrados que, a fines de junio, inauguró una nueva pista de su Aeropuerto Internacional Vilo Acuña en el que también rehabilitó la torre de control y otras instalaciones.
El turismo constituye el principal motor de la economía cubana pero, a partir de la irrupción de la pandemia de Covid-19 y según datos oficiales, pasó de recibir cuatro millones de turistas extranjeros –de los cuales un millón fueron canadienses- en 2018 a que sólo ingresen 36.470 viajeros en 2021.
De acuerdo a las proyecciones gubernamentales basadas en los 564.847 turistas que arribaron procedentes del exterior durante el cuatrimestre inicial de 2022, Cuba recibiría este año a dos millones de viajeros extranjeros.
"Para nosotros es muy importante porque como cadena vamos a tomar de forma integral la explotación comercial turística de esta isla, no sólo los once productos hoteleros que tenemos que son siete villas y cuatro hoteles, sino a su vez nos vamos a hacer cargo de la gestión extra-hotelera”, explicó Rafael Villanueva, director comercial de Blue Diamond Cuba en declaraciones formuladas ante las cámaras de la televisión cubana.
El ejecutivo también expresó que en octubre próximo empezarán a llegar los contingentes turísticos de Italia para, al mes siguiente en noviembre, iniciar el arribo de los canadienses, quienes son el mayor grupo de viajeros extranjeros que vacacionan en Cuba.
Como forma de competir contra el grupo español Meliá que lidera el mercado cubano operando cuarenta hoteles, su par canadiense Blue Diamond también asumirá la gestión del hotel Paseo del Prado, un cinco estrellas ubicado en la capital cubana de La Habana y que ahora cambiará de nombre porque pasará a denominarse Royalton Habana.