A partir de esta semana, gracias a esta medida gubernamental, si una empresa extranjera quiere invertir en el rubro turístico de China no tendrá que realizarlo a través de un socio local como sucedía hasta ahora restringiendo notoriamente el ingreso de capitales foráneos.
En comparación a 2019 cuando todavía no había irrumpido la ola de contagios masivos de coronavirus, los viajes disminuyeron un 38% al mismo tiempo que la facturación se redujo a la mitad de la era previa al Covid-19.
Las férreas medidas sanitarias para arribar a China, que actualmente exige una elevada cantidad de exámenes PCR en los primeros días en el país, prácticamente le cerraron las puertas al turismo receptivo.
Cuando en el resto del mundo se disfruta de una nueva normalidad, China aún sufre cierres totales de determinadas regiones ante el surgimiento de nuevos casos de Covid siendo algo que también ahuyenta a los turistas que corren el riesgo de quedarse varados sin poder salir de la habitación del hotel sin poder retornar a sus hogares y debiendo abonar de su bolsillo cada día de estadía forzada.
Además, sin perjuicio de esta medida adoptada por el gobierno chino, continúan algunas restricciones formales a las inversiones extranjeras en función a las categorías o los territorios.
Conocida como la semana dorada, las vacaciones por el Día Nacional en China duplicaron las cifras del turismo en relación a ese feriado de 2021 debido a la solicitud del gobierno local reclamando que se restrinjan los viajes hasta fines de octubre para evitar un rebrote de Covid-19.
Según informó el diario oficialista China Daily, las agencias online de viajes realizaron reservas de alojamiento que triplicaron el volumen interanual en el popular distrito montañoso y rural de Miyun, perteneciente a la capital Beijing.
Desde el pasado viernes 1° de julio, los extranjeros vinculados a negocios; educación; ciencia; tecnología; deporte y cultura podrán entrar a China sin exhibir la carta de invitación –técnicamente PU Letter- cuando soliciten el visado de comercio, trabajo, visita o reagrupación familiar
En 2019, previo a la irrupción de la pandemia de coronavirus, China integró el Top-10 mundial de los países más receptores de turismo gracias a recibir a 66 millones de viajeros procedentes del exterior. Este número supera en 2.800.000 personas a las visitas internacionales de la temporada anterior, constituyendo un alza del 4,45%.
Además, estos visitantes extranjeros generaron un ingreso de divisas de 40.000 millones de dólares por consumo de productos y servicios chinos que representa el 21% de todos los ingresos turísticos internacionales del extremo Oriente – Asia.