Tras un mes de negociaciones y presiones políticas, Carneiro dejó la titularidad de la cartera para retornar a su banca de diputada en la legislatura federal por el partido Unión Brasil, un espacio de centroderecha que compone la coalición oficialista a la que también pertenece el ahora ministro Sabino.
Este es el segundo cambio ministerial en esta tercera presidencia de Lula Da Silva porque en abril pasado dimitió el titular de la cartera de seguridad institucional, general de la reserva Marco Edson Gonçalves Dias, debido a la difusión de imágenes sobre su actuación durante el violento asalto a las sedes de los tres poderes durante la primera semana de enero.
La salida de Carneiro del gabinete es resultado directo de la presión ejercida por Unión Brasil en respuesta a los reclamos de sus principales figuras de este partido que aportó 59 de los 531 diputados oficialistas y nueve de los 81 senadores del gobierno de Lula en un parlamento cuya mayoría responde a la oposición conservadora del ex mandatario Bolsonaro.
Por su parte, Carneiro se incorporaría al partido Republicanos, otro espacio de la centroderecha local pero que, en contraposición a Unión Brasil, mantiene una posición independiente con relación a la gestión de Lula.
Con la salida de Carneiro disminuyó la participación femenina en el gabinete brasilero que ahora sólo tiene diez mujeres contra veintisiete hombre alejando al gobierno de Lula de la paridad de género que fue uno de sus pilares en la campaña electoral presidencial. La ministra saliente está casada con Waguinho, uno de los referentes territoriales del Gran Rio de Janeiro e intendente del municipio de Belford Roxo. Esa región es liderada por el bolsonarismo y la iglesia evangélica
Como principales logros de sus seis meses al frente del ministerio, Daniela Carneiro firmó un memorando de entendimiento con el gobierno español que prevé una alianza para llevar a cabo iniciativas en diferentes campos del turismo, en particular en lo que respecta a los Destinos Turísticos Inteligentes (DTI) y aumentó el turismo receptivo mediante la expansión de la conectividad aérea.
Además, lanzó una guía para captar inversores del exterior que deseen invertir en las diferentes ramas de su industria del turismo detallando las oportunidades, requisitos e información necesaria.
Según datos gubernamentales oficiales, durante mayo pasado ingresaron 567 millones de dólares –equivalente a 517 millones de euros- a Brasil a través de las compras de productos y servicios realizadas por turistas que representa el récord histórico del quinto mes en cualquiera de los años anteriores.
De acuerdo a la información del Banco Central de Brasil, hubo un crecimiento del 52% en comparación a los 373 millones de dólares, unos 340 millones de euros, que se registraron por ingresos turísticos en mayo de 2022.
En el acumulado del año, los visitantes extranjeros le aportaron 2.721 millones de dólares, 2.480 millones de euros, a la economía brasilera que implicó un mejora del 35,9% en relación a 2022.