Los influencers de viajes presentan destinos de ensueño en sus redes sociales, creando una estética del viaje que influye en cómo las personas planean sus vacaciones. Especialmente entre la Generación Z, esta tendencia cobró fuerza con muchos utilizando plataformas como Pinterest y TikTok para inspirarse en imágenes perfectas que rara vez se corresponden con la realidad. Esta idealización, según un estudio divulgado por Stylist, puede llevar a la decepción y fomentar una cultura de la comparación que afecta la percepción de las experiencias reales.