A un costo accesible en comparación con otros destinos europeos, el pasaje desde Argentina hasta Bosnia Herzegovina cuesta un promedio de 663 euros demandando unos cinco euros diarios por una habitación simple en un hostel u hotel de dos estrellas.
En materia de alimentación cotidiana, una comida promedio en un restaurant barato ronda los seis euros mientras que una cerveza sale dos euros, el doble que un café capuccino en alguno de los tantos bares de su capital Sarajevo.
Quienes quieran un menú promedio en cualquier local de comidas rápidas deberán gastar aproximadamente cuatro euros incluyendo una botella de agua mineral o un vaso chico de gaseosa.
Con edificios que exhiben secuelas del asedio bélico sufrido durante cuatro años, la ciudad bosnia de Sarajevo es la principal atracción turística del país gracias a su antiguo bazar Bašaršija y el Puente Viejo que, tras destruido por los bombardeos, fue reconstruido tal como lucía originalmente en su inauguración a inicios del siglo quince.
También llamada la Jerusalén de Europa, Sarajevo es acaso la ciudad con mayor diversidad religiosa y cultura del viejo continente siendo hogar de musulmanes, ortodoxos, católicos y judíos.
Se recomiendo visitar las Cataratas Kravica, el sitio natural más conocido del país con un salto de agua para bañarse, comer en alguno de sus dos restaurantes y pasear por senderos rodeados de verde.
Entre sus pueblos más antiguos, es aconsejable viajar a Pocitelj, una ciudad fortificada de la época otomana a orillas del río Neretva. Desde las antiguas torres y murallas se divisa la ciudad como el entorno natural que la rodea.