Con una gorra que no le impidió ser reconocido por sus admiradores, el vocalista Jagger se fotografió en la fuente del Ángel Caído o monumento del Ángel Caído que está ubicado en el parque del Retiro y constituye la única obra en un paseo público que retrata al diablo tras ser expulsado del cielo por desobedecer los mandatos de Dios.
Mick Jagger transitó los jardines de Madrid y se fotografió frente a la fuente del Ángel Caído, en la que se sitúa una escultura realizada por Ricardo Bellver y un pedestal de Francisco Jareño. Antes de esta fuente, en esta misma glorieta, estaba la fábrica de Porcelanas de la China.
En una visita especial ya que fue exclusiva para él durante una mañana que sus puertas no estaban abiertas al público, Jagger caminó los pasillos del Museo Reina Sofía donde se fotografía frente a El Guernica, la obra del pintor Pablo Picasso que retrata el sufrimiento de la población vasca que fue bombardeada por la aviación alemana e italiana durante la Guerra Civil Española.
Pasado el mediodía, junto a un acompañantes y custodiado por dos guardaespaldas, el frontman stone se sentó en una mesa del restaurante Las Tortillas de Gabino donde degustó una tortilla de papas con cebolla; escalope Armando y la róbola Arza, un pescado de mar semi-graso acompañado de guarnición de verduras. Además de pagar la cuenta que ascendió a ciento cincuenta euros, dejó una propina de doscientos.
Keith Richards con su esposa Patti Hansen al igual que Ron con Sally y sus dos gemelas, Grace y Alice de apenas seis años, más Jagger con su hija Georgia asistieron a La Taberna de Ángel Sierra en el barrio de Chueca, en la esquina de la calle Gravina con San Gregorio, para después acudir a un tablao flamenco donde cantó y bailó Israel Fernández.
Otro punto emblemático de España que no pasaron por alto fue la taberna La Fontana de Oro, otrora un antiguo café de tertulias entre intelectuales y artistas de los siglos diecinueve y veinte como Benito Pérez Galdós, quien ambientó su novela de 1870 en este lugar y que lleva el nombre del local que ahora es frecuentada por turistas que miran partidos de fútbol, conciertos de música en directo y sesiones de Dj.
Declarado por la UNESCO como patrimonio de la humanidad, La Rosaleda del parque de El Retiro fue otro de los puntos madrileños que visitaron Los Stones tal como debe hacer todo turista cada vez que llega a Madrid.