Según la Organización para el Turismo en el Caribe, más de la mitad de los visitantes procedieron de los Estados Unidos que aportó 14,6 millones de viajeros, tres millones más que en 2021.
Por su parte, se duplicó la cantidad de turistas europeos que alcanzó los 5,2 millones mientras Canadá quedó por debajo de lo esperado con sólo 2,1 millones de visitantes.
“Es evidente que frente a golpes devastadores propinados por la pandemia, nuestra región se sobrepuso con esperanza, fuerza y determinación”, declaró el titular de la Organización para el Turismo en el Caribe, Kenneth Bryan, durante una conferencia de prensa en Barbados.
También ministro de turismo de las Islas Caimán, Bryan consideró que el actual escenario permite ilusionarse con un progreso del 15% para 2023 e incluso superar el récord de 32 millones de visitantes que la región caribeña alcanzó en 2019, una cifra que disminuyó un 65% al año siguiente cuando estalló la pandemia.
Esta tendencia turística en alza representa una buena noticia tanto para los funcionarios gubernamentales como para las empresas locales porque el Caribe es una de las regiones donde el turismo tiene el mayor incidencia en la economía nacional.
“La región caribeña tuvo una de las tasas de recuperación más rápidas de 2022”, sostuvo Neil Walters, secretario general de la organización turística al comunicar que seis islas y países incluyendo a Puerto Rico, República Dominicana e Islas Vírgenes de Estados Unidos recibieron más visitantes extranjeros que los registrados previo a la pandemia de coronavirus.
El número de cruceros también trepó a niveles insospechados con 19,2 millones de visitas en 2022 quintuplicando la cantidad del año previo. Aún así, se situó por debajo del récord de 30,4 millones alcanzado en 2019.
Casi todos los destinos reportaron un aumento de visitas menos Haití donde el turismo receptivo mermó 20% a raíz de la violencia e inestabilidad política.