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La administración del gobernador mendocino Rodolfo Suárez intentó que una firma privada explote parcialmente el complejo Penitentes que ahora está a cargo del estado provincial para transformarlo en un parque turístico sin medios de elevación sumado algunas restricciones más.
Según se comunicó en la Resolución 178 del Boletín Oficial, el Ente Mendoza Turismo (Emetur) declaró en su artículo 1 que no conviene aceptar las propuestas de Di Pietro Salvador y En Sairf SRL. Por lo tanto, no se otorgaron los "permisos de uso precario para el concurso de presentación de proyectos para la puesta en valor, refuncionalización y prestación de servicios turísticos y de apoyo de actividades recreativas en el parque de montaña Los Penitentes, temporada 2022-23".
Mediante el artículo 3 se informó que se podrán interponer “recursos de revocatoria o alzada ante el Poder Ejecutivo contra la resolución dentro de los quince días hábiles de notificada esta resolución”.
En los considerandos de la norma, la Comisión de Pre-adjudicación compuesta por la contadora Laura Sileoni, el arquitecto Mariano Alguacil y el ingeniero Héctor Smud sugirió “no proceder a la evaluación dentro de la grilla del puntaje del artículo 9 debido a que tanto la oferta N°1 de Di Pietro Salvador y la N°2 de En Sairf SRL no atienden a los intereses públicos actuales”.
El Ente Mendoza Turismo presidido por Marcelo Montenegro y el Ministerio de Gobierno, Trabajo y Justicia a cargo de Víctor Ibáñez publicaron en junio pasado un concurso de presentación de proyectos "para la puesta en valor, refuncionalización y prestación de servicios turísticos y de apoyo de actividades recreativas" en el predio del ex centro de esquí ubicado en Uspallata, Las Heras.}
Los Penitentes es una localidad y centro de esquí en el Departamento mendocino de Las Heras, a 170 kilómetros de la capital provincial, sobre la Ruta Nacional 7; a 25 kilómetros del límite internacional entre Argentina y Chile; y a solo 4 kilómetros de la base del Aconcagua, por lo que muchos de los andinistas utilizan sus hoteles en verano para aclimatarse.
Su calidad de nieve y el paisaje de sus formaciones rocosas aparentan una peregrinación de monjes (por eso su nombre) y posee más de trescientas hectáreas de superficie esquiable aunque no siempre cae suficiente nieve para abrir sus puertas.
