Tras la elección de Río de Janeiro como sede de esta cumbre intercontinental, el Ministerio de Turismo de Brasil publicó un comunicado oficial de prensa informando que se trató de un reconocimiento al compromiso que el gigante sudamericano viene impusando a favor del crecimiento e integración regional. 

Durante la cumbre realizada recientemente en Zambia, Carlos Henrique Sobral, secretario de Infraestructura, Crédito e Inversión Turística de Brasil, destacó el crecimiento significativo de los vuelos directos entre África y diferentes aeropuertos verdeamarelos.

“Brasil se convirtió en la puerta de entrada de África a Sudamérica, con conexiones aéreas desde Sudáfrica, Angola, Etiopía y Marruecos”, comentó, resaltando la interconexión basada en la herencia africana compartida y el apoyo estatal al afroturismo mediante el programa Black Routes.

Sobral enfatizó los avances del país en el sector turístico, mencionando que en 2024 Brasil recibió 6,7 millones de turistas extranjeros y el gasto de estos viajeros alcanzó los 7.300 millones de reales brasileños que, al cambio oficial actual, equivale a 1.257 millones de dólares.

El funcionario público brasilero también destacó la atracción de inversiones por 350 millones de dólares que calificó como un indicador claro del creciente interés global por el mercado de su país y el potencial de desarrollo sostenible.

Además del impulso al turismo internacional, Brasil está fortaleciendo la infraestructura necesaria para captar y gestionar estas inversiones. La creación de la Escuela Nacional de Turismo es uno de los proyectos clave para formar profesionales capacitados y mejorar la calidad del sector, lo que demuestra una visión integral para consolidar el turismo como motor económico y social.

Esta cumbre en Río de Janeiro congregará a expertos, empresarios y autoridades de África y las Américas para intercambiar experiencias, diseñar políticas inclusivas y promover una industria turística que contribuya al crecimiento económico con respeto ambiental y social. El encuentro será una oportunidad para estrechar lazos y fomentar proyectos que fortalezcan la colaboración entre las dos regiones.

Para los profesionales argentinos y del resto de América Latina, esta iniciativa representa un modelo inspirador de cooperación internacional y desarrollo turístico pensado con una mirada global. Participar activamente en este espacio de ONU Turismo es clave para fortalecer las redes, ampliar mercados y contribuir a un turismo más sostenible e inclusivo en toda la región.

La elección de Río de Janeiro como sede reafirmó la posición de Brasil como líder regional en turismo y un puente estratégico entre África y América Latina. El camino hacia un turismo más integrado y sostenible ya está en marcha, y este evento será un punto de inflexión para la industria en ambas orillas del Atlántico.