El programa invita a las personas a consultar a sus médicos sobre los beneficios terapéuticos de viajar a Suecia, destacando cómo el estilo de vida nórdico —basado en el contacto con la naturaleza, la actividad física y la conexión social— puede reducir el estrés, mejorar la circulación y fortalecer la salud mental.
La propuesta se apoya en un recetario de experiencias saludables, respaldadas por evidencia científica. Entre ellas figuran las caminatas por los bosques suecos, conocidas como baños de bosque o forest bathing; las saunas seguidas de inmersiones en agua helada; y la tradicional fika, una pausa cotidiana para compartir café y conversación, considerada clave en la vida social y emocional del país.
Según la profesora Yvonne Forsell, del Instituto Karolinska, estas prácticas contribuyen a regular el estado de ánimo y mejorar la función cognitiva, efectos que se potencian cuando se realizan en entornos naturales. “La conexión con la naturaleza tiene efectos medibles en la reducción del cortisol, la presión arterial y la ansiedad”, afirmó la especialista nórdica.

La campaña incluye una receta descargable que los usuarios pueden presentar a sus médicos para iniciar la conversación sobre este tipo de “prescripción” alternativa. Si bien no forma parte del sistema nacional de salud ni cubre los costos del viaje, la propuesta busca concientizar sobre el poder del turismo como herramienta preventiva y de bienestar integral.
Con esta estrategia, Suecia no solo promociona su identidad como destino sustentable, sino que inaugura un nuevo paradigma: el turismo como medicina. En lugar de vender paisajes, el país invita a experimentar una forma de vida más equilibrada, donde la salud, la naturaleza y la cultura se entrelazan como parte de una misma experiencia transformadora.
“La Receta Sueca” ya despertó interés en profesionales de la salud y organismos turísticos de todo el mundo, posicionando al país escandinavo como referente global en innovación turística y bienestar emocional.
Con el compromiso de cumplir los objetivos de desarrollo sostenible, el turismo sueco se perfila para reducir a cero sus emisiones de carbono a fines de 2045 como forma de sumar valor agregado a quienes visitan sus destinos.









