Como primera medida, te sugerimos comprar el boleto JR Pass porque te permitirá viajar en tren en forma ilimitada por todo Japón incluyendo tu asiento reservado.
Para asombrarte con los rascacielos deberás acercarte a la zona de Shinjuku cuyo edificio gubernamental metropolitano cuenta con miradores gratuitos con vistas panorámicas de la capital nipona.
Reservate media jornada para pasear por Omoide Yokocho, Golden Gai y Kabukicho. La otra mitad de la jornada sería aconsejable destinarla a Asakusa y el templo Senso-ji. Subí al mirador del centro de información turística, admirá la puerta Kaminarimon y hacé turismo de compras en la calle comercial Nakamise-dori.
Previo a la pandemia de Covid-19, Tokio recibió a 10,44 millones de turistas extranjeros en 2019. Según Euromonitor se contabilizaron todos los visitantes procedentes del exterior con al menos una pernoctación. Como promedio, cada uno de estos viajeros gastaron 2.341 dólares estadounidenses por día.
En alguna mañana de sol, salí a caminar por el parque Yoyogi recorriendo el santuario Meiji y la calle Takeshita-dori en Harajuku donde hay negocios de calzados, accesorios e indumentaria.
La Torre de Tokio es uno de los máximos íconos de la ciudad, a su lado está enclavado el templo Zojoji. Son dos atractivos imperdibles, consagrá una mañana o tarde para ambos porque no te arrepentirás.
Cuando recorras la capital japonesa, visitá el barrio Shibuya que ofrece miradores, la estatua de Hachiko, miradores y locales con todas las prendas que sueña un fanático de la moda.
Por último, Odaiba es un lugar perfecto para pasar desde medio día hasta el día entero combinándolo con Asakusa y el crucero fluvial Himiko.