Entre sus atractivos más valorados se encuentran las amplias veredas, plazas y un sistema de riego milenario que adornan la ciudad, así como un sistema hotelero con más de 12.000 plazas que representan el 28% del total provincial. La capital provincial tiene más de 293 establecimientos hoteleros que fortalecen su capacidad para recibir a un gran número de viajeros.
El denominado turismo sanmartiniano fue una de las apuestas más destacadas, fortaleciendo la identidad cultural de Mendoza como ciudad vinculada a nuestro libertador Don José de San Martín. La iniciativa incluye un recorrido por diecinueve sitios emblemáticos que celebran la figura del máximo prócer argentino, ofreciendo a los turistas una profundidad histórica única durante su recorrido.
El turismo de naturaleza es otro pilar importante con actividades que promueven el contacto directo con el entorno natural. La Reserva Natural Divisadero Largo ofrece tours y actividades como yoga y astroturismo mientras que el Parque Deportivo de Montaña invita a explorar los senderos y la biodiversidad local.
En la esfera del turismo sustentable, Mendoza implementó circuitos de bicicleta que promueven una movilidad sostenible y permiten a los visitantes disfrutar de la ciudad y sus alrededores de una manera ecológica. Este enfoque sustentable no solo beneficia al medio ambiente, sino que también ofrece una experiencia enriquecedora para los turistas.
Por último, su condición de capital mundial del vino refuerza la vocación vitivinícola de Mendoza con eventos que destacan la calidad del vino local y fomentan el enoturismo. La participación de bodegas y productores locales en eventos como Música y Vino en las Alturas y la Noche de las Vinerías demuestra la riqueza vitivinícola de la región.
En suma, la ciudad de Mendoza se afirmó como un destino turístico de primer nivel gracias a su variada oferta, también se prepara para recibir el 2025 con nuevas iniciativas que prometen seguir atrayendo a visitantes de todo el mundo, demostrando su capacidad para innovar y mejorar continuamente en el sector turístico.
La tierra del sol y el buen vino también fue uno de los destinos más elegidos de la Argentina en el receso de mitad de año pasado cuando ingresaron 1.560 millones de pesos a través de las 240.000 personas que recorrieron la provincia de Mendoza durante las dos semanas de vacaciones invierno con un promedio del 90% de ocupación hotelera