Durante el 2024, ciudades como la capital San Miguel de Tucumán, Yerba Buena y Tafí Viejo participaron en este plan que fue impulsado por la Secretaría de Turismo, Ambiente y Deportes de la Nación junto con la coordinación local de los especialistas que integran el Ente Tucumán Turismo (ETT).
El programa guió a diversas organizaciones turísticas en la adopción de sistemas de gestión ambiental y buenas prácticas que asegurarán la calidad ambiental, social y cultural mientras optimizan el rendimiento económico.
Desde mediados de abril pasado, los participantes asistieron a una serie de talleres teórico prácticos donde recibieron la asistencia técnica de expertos de la industria de los viajes en materia de alojamiento, transporte, gastronomía, museos y reservas naturales.
Mauricio Lestard, del Departamento de Formación Turística de la ETT, resaltó que el proyecto involucró a prestadores de servicios al mismo tiempo que amplió las ofertas de capacitación en la provincia de Tucumán.
Entre los logros del programa se destacó la implementación de medidas innovadoras para reducir la huella ambiental, mejorar la satisfacción de los clientes y fomentar relaciones sólidas con las comunidades locales.
A su vez, una referente como Marina Briñon que forma parte de la Dirección Nacional de Calidad e Innovación Turística, encabezó la revisión final en Yerba Buena, destacando la importancia de la colaboración entre el Ente Tucumán Turismo y la Secretaría de Turismo Nacional.
"El éxito de este programa reflejó el compromiso de toda la provincia de Tucumán con la calidad y la sostenibilidad en sus innumerables destinos turísticos", concluyó Briñon como corolario de esta formación profesional.