Si bien se trata de un objetivo con la vara bien alta, las proyecciones muestran que sería alcanzable dado que Malasia ya fue visitada por 4.380.000 visitantes internacionales durante el trimestre inicial de 2023.

Esta meta está respaldada por el programa Malasia Smart Tourism 4.0 que comenzó en 2018 favoreciendo el acceso a productos y servicios turísticos basados en tecnologías de la información y las telecomunicaciones para crecer de los actuales 25.000 millones de dólares a 110.000 millones a finales de la década. 

Otra forma de atraer extranjeros a Malasia, sobre la que informó en las últimas semanas el New Straits Times, consistiría en el regreso del programa Malasia, mi segundo hogar que eliminaría trabas burocráticas y trámites extensos para ser más competitivos frente a las políticas de otros países del sudeste asiático

Los turoperadores que promueven este cambio argumentan que la mayoría de los extranjeros adinerados que buscan residencia en el extranjero evitan Malasia porque sus requisitos son demasiado estrictos y su normativa sobre visados resulta demasiado rígida en comparación a destinos de la región.

El Primer Ministro malayo, Anwar Ibrahim, anunció recientemente su intención de autorizar los vuelos turísticos chárter, después de que el Ministerio de Turismo, Artes y Cultura de Malasia (llamado MOTAC) diera a conocer en febrero un plan -el Programa de Recuperación del Turismo 2023- para reactivar la industria turística del país, que está en crisis desde la pandemia del Covid-19.

Titular de la cartera malaya, Datuk Seri Tiong King Sing permitirá la concesión de visados turísticos al momento de la llegada, visados de entrada múltiple, visados electrónicos y visados de tránsito dejando atrás las férreas medidas aplicadas durante la pandemia de coronavirus.

Según la Autoridad de Desarrollo de Inversiones de Malasia, el turismo es la tercera fuente de ingresos de esta nación surasiática después de su industria manufacturera y el comercio de productos.

Previo a la irrupción de la ola de contagios masivos de Covid-19, el turismo contribuía con el 15,9% del Producto Bruto Interno (PBI).

La crisis económica que causó la pandemia afectó al turismo global pero Asia Pacífico fue la región más golpeada con un 72% menos de llegadas de turistas mientras Europa tuvo una disminución del 66%. En África y Oriente Medio hubo una merrma del 57% mientras en América cayó un 55%. 

Asia-Pacífico es aquella parte del mundo cercana al Océano Pacífico occidental que incluye Asia oriental, Oceanía, el Lejano Oriente ruso, Asia meridional y suroriental.