Según datos del Observatorio Argentino de Turismo, más del 60% de los viajes realizados durante fines de semana largos en 2024 correspondieron a escapadas de corta distancia. Esta tendencia se mantiene en estos meses del año siendo impulsada por la búsqueda de descanso inmediato, la reducción de costos de transporte y la posibilidad de compartir más tiempo en familia.
Entre los destinos más elegidos se destacan los pueblos rurales de la provincia de Buenos Aires como Uribelarrea, San Antonio de Areco o Carlos Keen donde el turismo gastronómico y las ferias artesanales son protagonistas. En las provincias de Córdoba y Santa Fe crece el interés por ríos, lagunas y sierras a pocos kilómetros de las grandes ciudades mientras que en el Litoral y Cuyo el protagonismo está monopolizado por experiencias al aire libre y el enoturismo.
Los especialistas recomiendan planificar con antelación y verificar la oferta local de hospedajes, que suelen ser pequeños y de gran demanda en fechas clave. También destacan la importancia de elegir emprendimientos habilitados, lo que garantiza seguridad y calidad en el servicio. Otra sugerencia es optar por medios de transporte sostenibles, como el tren o los traslados grupales, para reducir el impacto ambiental y abaratar costos.
Además, el turismo de cercanía invita a redescubrir la identidad cultural de cada región. Participar de festividades locales, probar platos típicos o recorrer mercados y museos comunitarios aporta valor a la experiencia y contribuye al desarrollo económico de los pequeños prestadores.
El auge de esta modalidad refleja un cambio en los hábitos de viaje: menos kilómetros, más vivencias significativas. Con propuestas accesibles y variadas, el turismo de cercanía se afirma como una opción que combina disfrute, sostenibilidad y la oportunidad de reconectar con lo que ofrece cada rincón del país.
Las escapadas de fin de semana también revitalizan las economías regionales, al favorecer a productores locales, prestadores independientes y comercios de cercanía. El gasto promedio de los turistas en este segmento aumentó un 17% en comparación al año pasado, según cifras de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), con especial foco en gastronomía, experiencias y hospedaje.
El perfil del viajero que elige este tipo de destinos responde a profesionales de entre 30 y 55 años con estudios superiores y fuerte presencia en redes sociales, lo que multiplica el alcance de la promoción digital boca en boca. El deseo de reconectar sin alejarse demasiado del hogar ni invertir grandes sumas de dinero es uno de los motores de este fenómeno.
Para las agencias, prestadores y operadores turísticos, las escapadas representan una gran oportunidad de diversificación de productos, cross-selling y fidelización, con paquetes de corta duración, promociones de temporada baja y alianzas con municipios para campañas conjuntas.
En un contexto donde la planificación simple y la experiencia emocional valen más que la distancia o el lujo, las ciudades intermedias encuentran un nuevo protagonismo. El desafío consistirá en mantener el crecimiento con sostenibilidad, profesionalismo y capacidad de respuesta a un turista exigente, informado y con ganas de volver.